Casi un tango
Esa noche me di cuenta que no sería para mí.
Su nombre junto al de ella dando vueltas en el tonto protector de pantalla de la computadora, el nombre completo de ella bamboleándose al final de la partitura que yo pensé que sólo había escrito él, y el hecho indefectible de que hace años que son novios, me dieron la terrible certeza que yo no quería ver.
Puta madre. Otra vez me enamoro de uno con novia, pensé.
Puta madre.
Encima que dejo de lado mis creencias idiotas de no fijarme en nadie mayor de 35 años, de no mirar siquiera a quien fue o es amigo de un ex novio, de ni siquiera pensar en un amigo con fines sexoserios…Encima de todo eso, no me va a querer.
Hay un levísimo nivel de algo que podría llamar cariño, amor, gusto, cuidado o histeria.Claro, ya sé… es amistad. Y a mi me cuesta verlo ya como a un amigo.
Sin querer me descubrí contándole cosas de mi pasado con Fer, que él no conoce.
Sin querer charlé horas de nada. Horas de música. Horas, siglos quizás mirando sus manos en la guitarra
Eso lo puedo hacer, porque lo que en realidad quiero es besarlo hasta cansarme, abrazarlo hasta que duela, emborracharme de él hasta desmayarme de amor y todas esas cursilerías maravillosas que decimos en este estado químico y místico del amor.
Encima de todo eso, no me va a querer…
Creo que algo me quiere. Pero no de manera romántica.
Lo que más duele es tener una certeza como llaga, rasgo de inseguridad ya asquerosa, que me dice que si yo fuera de alguna otra manera ( ni se cuál), y quizás supiera escribir música, podría tener la confianza para conquistarlo, o algo así.
Hice un experimento extraño: puse el cd que él me grabó (todo tangos) en la compu, y al azar, con los ojos cerrados, seleccioné un tema. Y salió Mama, yo quiero un novio, que es el tema del día en mi cabeza.
Lo más gracioso es que lo canta una japonesa, y una parte es en japonés. Y tratar de entenderla, es como tratar de entender esto que a veces llamo destino.
Ya se que no será para mí. Ya lo sé. Entonces todos los signos de la vida se vuelven japoneses.
Y una, que adivina el chino, pero del japonés ni jota, se entra a marear a niveles nunca pensados.
Está bien. Cualquiera piensa que la vida era otra cosa y no esto, pero...Las migajas no me conforman realmente, y sin embargo las como. Y por eso engordo en la medida de lo imposible, cubriéndome otra vez del disfraz que no me pertenece, y volviendo al encierro del miedo de no ser.
Me aferro al amor como un náufrago a su tabla. Y haciendo fuerza para abajo, me ahogo lentamente de ilusiones o de amarguras.Si no me fijo en un hombre ocupado con novia (casado nunca) me fijo en uno que no puede ni acercarse al compromiso de venir a tomar mate.
Prefiero, a veces, que me desengañen de una vez, a esperar o idealizar lo que no es ni será.La desventaja de todo esto, es que es mi amigo, y no me puedo borrar tan fácil como quisiera. Y a su casa voy a seguir yendo.
Y a sus ojos también.
Esa noche me di cuenta que ya no sería para mí. Se va a casar con ella seguramente.
Acariciarlo en sueños no es suficiente.
Lo peor del caso es que la semilla del amor ya está sembrada (hace rato, creo, y no lo había registrado) y una vez en mi cabeza de tierra fértil ya no puede ser arrancada.Generalmente la saco de mí una vez que el árbol creció y se secó, o lo bajaron de un hachazo, dos formas en extremo dolorosas de alejarse del amor, que es una planta tan hermosa para regar y ver crecer.
Escucho los tangos que me regaló, y todos lo huesos que tengo, y los que no tengo también, me crujen como barco viejo.
Voy a salir al frío de la noche sólo por él. Y por mí, aunque nunca se quede conmigo.
Quizás caminando las calles del barrio , aunque no encuentre una respuesta, encontraré algún tipo de paz.
5 comentarios
Bustelo -
Fender -
bustelo -
Peste -
No es mucho peor _sentir_ lo mismo respecto de la persona que es tu pareja? (Parece una paradoja, pero no lo es).
Y: aparte de sentir con una intensidad se diria animal, no te torturas con una intensidad de mistico cristiano?
Fender -
No te puedo desear suerte, porque en el amor no existe el azar, solo una serie de curvas que van cruzando la linea de la felicidad. Cuando más rapido llegas a ella, mas rapido salis despedido (y mas lejos).
A mi se me acabaron las recetas, lo unico que hago por ahora es mantener el caparacho firme y tener asumido que estoy solo (pero no abandonado, eh!).